Kim Han-sol, nieto del fallecido líder norcoreano Kim Jong-il y sobrino del "gran sucesor" de la nación asiática, Kim Jong-un, ofreció una entrevista a un canal de televisión finlandés desde Bosnia, país en el que realiza sus estudios.
El joven de 17 años manifestó su intención de ayudar a mejorar "las cosas" para el pueblo de su país, frente a Elizabeth Rehn, la ex subsecretaria general de Naciones Unidas que desempeñó el rol de conductora en esta oportunidad.
"Siempre he soñado con regresar un día [a Corea del Norte] para hacer que las cosas sean mejores y más fáciles para la gente allá", expresó el muchacho en un fluido idioma inglés.
Han-sol también expresó el anhelo de reunificación de las dos coreas, incluso comentó que ha tenido amigos surcoreanos con los cuales pudo entenderse de a poco tras la extrañeza que le causó relacionarse con ellos.
"Al reunirme con otras personas, he concluido que escucharé las opiniones de ambos lados, ver qué es bueno y qué es malo, y tomar mis propias decisiones", sentenció el asiático que además reitera sus ganas por formar parte de proyectos humanitarios.
Kim Han-sol no recuerda cómo su tío se "convirtió en un dictador" después de asumir el poder en 2011, y cuando le preguntaron por su padre dijo que "no estaba interesado en la política", algo contradictorio con los rumores generados por la cadena de televisión japonesa Asahi en torno a su presunto asesinato el año 2001 cuando se opuso a una "sucesión dinástica".