Una niña de nueve años le salvó la vida a su familia gracias a su rápido actuar y dominio tecnológico luego de que se desvanecieran por inhalación de monóxido de carbono en su vivienda de Massachusetts, Estados Unidos.
Según consignó CNN, la pequeña Jayline Barbosa estaba durmiendo cuando escuchó a su padre gritando y pidiendo socorro, puesto que acababa de ver a su esposa desmayándose. Tras ello, el hombre también perdió el conocimiento.
Rápidamente, pero con gran calma, Jayline tomó el teléfono móvil de su padre para pedir ayuda. Sin embargo, la pantalla estaba bloqueada y necesitaba el reconocimiento facial —denominado Face ID— de su papá para acceder al celular.
Pese a que el hombre estaba desvanecido, la niña consiguió escanear correctamente el rostro de su padre y sortear el sistema de seguridad biométrico. Teniendo acceso a todas las funciones del teléfono, Jayline pidió ayuda a los servicios de emergencia.
Se estima que el padre de la niña no tenía activado en su móvil el requisito "Atención" para Face ID, que implica que el usuario tenga los ojos abiertos o que esté despierto al momento de usar el reconocimiento facial.
Personal de emergencias acudió a la casa y se percató de que el monóxido de carbono provenía de un generador: llegaba a nivel potencialmente mortal a la vivienda. Cinco integrantes de la familia fueron llevados a un hospital, donde lograron recuperarse.
La madre de la niña, que despertó en el hospital, indicó que "no estaría aquí sin ella. Es tan inteligente".