Miguel, un niño de cinco años, falleció tras caer de un noveno piso de un edificio, de la ciudad de Recife, Brasil, mientras estaba al cuidado de la jefa de su mamá.
Mirtes, la madre del pequeño, trabaja como asesora del hogar y tuvo que llevar a su hijo a trabajar ya que, debido a la pandemia, los colegios se encuentran suspendidos.
Dentro de sus labores, Mitre tuvo que ir a pasear el perro de su jefa, por lo que el niño de cinco años se quedó en el departamento a cargo de la mujer.
Según han consignó el canal TV Globo, el niño no dejaba de llorar porque quería estar con su madre, por lo que la jefa de Mitre autorizó para que el pequeño saliera y tomara el ascensor solo.
Con cinco años, el niño subió al elevador y se perdió en el piso nueve, donde se precipitó desde una altura de 35 metros.
La jefa fue detenida el mismo día, sin embargo, tras pagar una fianza, quedó en libertad hasta que se realice el juicio.
“No voy a decir que estoy indignada ni alterada, porque el dolor por la muerte de mi hijo está prevaleciendo. Pero espero que se haga justicia. Porque si fuese al revés, creo que ni siquiera tendría derecho a fianza. Mi nombre estaría estampado y mi cara estaría en todos los medios", aseguró la madre del niño fallecido al medio anteriormente citado.
Y agregó: “Entró en el ascensor. No tuvieron paciencia para sacarlo del ascensor, para cogerlo por el brazo y sacarlo. Porque si fuesen los hijos de mi exjefa yo los sacaría. Ella nos dejaba sus hijos a mí y a mi madre. Y cuando yo se lo dejé a ella, desgraciadamente no tuvo paciencia para cuidarlo, para sacarlo[del ascensor]. Era un niño”