El Vaticano publicó este lunes un documento dedicado al respeto de la “dignidad humana” en el que denuncia prácticas como el cambio de sexo o la maternidad subrogada.
El nuevo texto doctrinal de la Iglesia católica se llama Dignitas infinita (“Una dignidad infinita”) y contiene una veintena de páginas, aprobadas por el papa Francisco, en las que se abordan temas claves como la guerra, los derechos a las personas migrantes, la pobreza y la justicia social.
El texto, fruto de cinco años de trabajo, fue publicado por el Dicasterio para la Doctrina de la fe, el poderoso órgano de la Santa Sede encargado del dogma que enumera casos de “violaciones concretas y graves” de la dignidad.
En él, la Iglesia católica critica el aborto, la eutanasia y la maternidad subrogada.
Y, aunque defiende los derechos de las personas LGTBI, en el texto recoge que el cambio de sexo “corre el riesgo de atentar contra la dignidad” de la persona.
Cambio de sexo, maternidad subrogada y aborto
En el documento, se recuerda que las personas LGTB+ deben ser respetadas y denuncia que “en algunos lugares, muchas sean encarceladas, torturadas e incluso privadas del bien de la vida solo por su orientación sexual”.
Sin embargo, también dedica un apartado de unos tres párrafos en contra del cambio de sexo, donde señala que “la dignidad del cuerpo no puede considerarse inferior a la de la persona como tal” y que el papa Francisco “enseña que lo creado nos precede y debe ser recibido como don”.
“Toda operación de cambio de sexo, por regla general, corre el riesgo de atentar contra la dignidad única que la persona ha recibido desde el momento de la concepción”, añade.
Para la Iglesia, según este documento, se excluyen de este caso las personas “afectadas por anomalías genitales que ya son evidentes al nacer o que se desarrollan posteriormente” y pueden “optar por recibir asistencia médica con el objetivo de resolver esas anomalías”.
Otro de los aspectos que denuncia es la gestación subrogada. Dice que entra “en contradicción total con la dignidad fundamental de todo ser humano”.
Al igual que denuncia el aborto y lo define como una de “las formas de violencia ejercida contra las mujeres”.
Añade que “la aceptación del aborto en la mentalidad, costumbres y en la propia ley” refleja “una crisis muy peligrosa de la moral”.
Además, por primera vez de forma tan específica, el Vaticano denuncia vehementemente la “teoría del género”, que Francisco tacha de “colonización ideológica muy peligrosa”.
“Teología obsoleta”
Varias asociaciones católicas LGBT en Italia y en el extranjero se mostraron decepcionadas por este nuevo documento, al considerar que afecta a la imagen y a los derechos de las personas transgénero y que podría tener efectos en el mundo real sobre las personas trans, alimentando la violencia y la discriminación.
New Ways Ministry, un grupo de defensa de los católicos LGBTQ, criticó el documento diciendo que es una “teología obsoleta” que contribuiría a continuar la discriminación contra personas no heterosexuales.
"Si bien establece una maravillosa justificación de por qué cada ser humano, independientemente de su condición en la vida, debe ser respetado, honrado y amado, no aplica este principio a las personas con diversidad de género", dijo gett del Ministerio New Ways.
"El Vaticano vuelve a apoyar y propagar ideas que pueden conducir a un daño físico real a personas transgénero, no binarias y otras personas LGBTQ+", concluyó DeBernardo.