Elon Musk confirmó este viernes quién será la nueva directora ejecutiva de Twitter, seis meses después de su polémica adquisición de la empresa.
El multimillonario dijo que Linda Yaccarino, exdirectora de publicidad de NBCUniversal, será la responsable de supervisar las operaciones comerciales de la red social.
Yaccarino empezará a trabajar para Twitter en seis semanas. De todos modos, Musk seguirá siendo el presidente ejecutivo de la empresa y el director del área de Tecnología.
"Estoy deseando trabajar con Linda para transformar esta plataforma en X, la aplicación para todo", escribió en Twitter Musk.
De esta manera, Musk confirmó la decisión después de activar las especulaciones tras decir previamente este semana que había encontrado a la persona para ocupar el puesto sin revelar la identidad.
El multimillonario dijo que próximamente organizará un Twitter Spaces con Yaccarino para que el público la conozca mejor.
Musk, que compró la plataforma el año pasado por US$44.000 millones, necesitaba una persona que pudiera dirigir la empresa para volver a centrar su atención en sus otros negocios, que incluyen el fabricante de coches eléctricos Tesla y la firma de cohetes SpaceX.
Con menos del 9% de las empresas tecnológicas de la lista Fortune 500 dirigidas por mujeres, Yaccarino se convertirá en el raro ejemplo de una mujer en la cima de una gran empresa tecnológica.
¿Quién es Linda Yaccarino?
Licenciada por la Universidad Estatal de Pensilvania y residente en Long Island, a las afueras de Nueva York, Yaccarino, de 59 años, trabajó 15 años en Turner Entertainment antes de incorporarse a NBCUniversal, donde estuvo a cargo de 2.000 personas y del lanzamiento del servicio de streaming del medio.
En su trabajo, Yaccarino se ha caracterizado por mantene restrechas relaciones con grandes marcas, auspiciantes en los programas de televisión, incluso los que tienen fama de ser subidos de tono como Sex and the City cuando se estrenó.
Un perfil publicado en 2005 la describe como una mujer ocupada, casada y madre de dos hijos, que entonces tenían 13 y 9 años.
"No tengo ninguna afición", decía entonces.
Claire Atkinson, de Business Insider, ha seguido la carrera de Yaccarino durante dos décadas y dice que su experiencia en publicidad podría ayudar a Twitter, que ha visto caer bruscamente sus ventas de anuncios desde la adquisición por parte de Musk.
"Si Twitter quiere monetizarse, mejor de lo que lo ha hecho, Linda sería la persona ideal para conseguirlo", dice Atkinson. "Es el tipo de persona que imagino que necesita Elon Musk. No se dejará arrollar".
Yaccarino se enfrentará al difícil reto de dirigir una empresa que ha luchado por ser rentable, al tiempo que se enfrenta a un intenso escrutinio sobre cómo Twitter maneja la difusión de información falsa y gestiona los problemas de incitación al odio.
Los críticos expresaron su preocupación después de que Musk despidiera al personal encargado de controlar los abusos y empezara a cobrar por las marcas azules, que antes eran señal de una cuenta autenticada.
Musk ha reconocido un descenso "masivo" de los ingresos, aunque el mes pasado le dijo a la BBC que las empresas estaban volviendo.
En una charla sobre publicidad el mes pasado, Yaccarino entrevistó a Musk y le preguntó qué estaba haciendo para garantizar a las empresas que sus marcas no estarían expuestas a riesgos.
Pero ha habido cierto escepticismo instantáneo ante el nombramiento de Yaccarino en las redes sociales.
Su rol en el Foro Económico Mundial, una organización considerada negativamente como "globalista" por la derecha, no ha sido bien recibido en algunos sectores.
También ha sido cuestionada su participación política en un consejo de deportes, fitness y nutrición de la Casa Blanca bajo el mandato del expresidente Donald Trump.
Musk, que también ha colocado a mujeres en puestos de responsabilidad en SpaceX y Tesla, es conocido por ser un jefe notoriamente impredecible y exigente.
Atkinson augura que los dos ejecutivos de Twitter se enfrentarán a "conversaciones difíciles" sobre cómo manejar la moderación, especialmente con las elecciones presidenciales de 2024 de Estados Unidos cada vez más cerca.
"Nadie sabe cuánto durará Linda en estas difíciles situaciones de gestión", plantea Atkinson.