El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, fue sometido exitosamente a una cirugía en la que se le implantó una prótesis de cadera para corregir problemas en la cabeza del fémur provocados por la artrosis y que le causaban permanentes dolores.
La cirugía comenzó al mediodía del viernes y se prolongó por cerca de tres horas, según explicó el jefe del equipo médico, Roberto Kalil Filho.
Luego fue sometido a una pequeña cirugía para retirar un exceso de piel en los párpados, según los médicos, para aprovechar la anestesia general.
Lula, de 78 años, "respondió muy bien a la anestesia" y en breve será transferido a una habitación común, sin pasar por cuidados intensivos, explicó Kalil.
El líder izquierdista se operó con el objetivo de colocar una prótesis para aliviar los dolores de una artrosis, que lo aquejan desde hace por lo menos un año. Está previsto que el presidente brasileño salga del hospital a más tardar el martes.