Manuel Ranoque, padre de los niños rescatados tras pasar 39 días en la selva colombiana, ha denunciado este domingo que el Frente Carolina Ramírez de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia le ha amenazado de muerte.
"El frente Carolina Ramírez me está buscando para matarme. Tengo amenazas porque para ellos soy un objetivo. Yo sé que esas personas descaradas primero que todo pueden comenzar a presionarme con mis hijos y eso nunca lo voy a permitir", ha explicado Ranoque en declaraciones recogidas por la prensa colombiana.
El hombre, quien ejerce además como gobernador de la comunidad uitoto Los Monos, ha asegurado que presuntos miembros de este grupo le amenazaron abiertamente y asegura estar en posesión de audios que lo demuestran. Por este motivo huyó de su comunidad un mes antes del accidente.
"Ellos tienen interés económico y mientras uno no se acoja a lo que ellos digan, uno es un enemigo para ellos. Que me van a buscar directamente aquí, que me van a mandar a una persona directamente aquí", ha relatado.
Ranoque ha pedido además "una vivienda digna" para él y sus hijos. "Necesito garantizarles el estudio a mis hijos. Necesito la seguridad de mi vida y la de mis hijos", ha apelado.
Por otra parte, Ranoque ha expresado su malestar por el hecho de que las autoridades visitaran con cámaras el Hospital Militar Central de Bogotá en el que están ingresados sus hijos y ha pedido a la prensa no publicar más imágenes de los menores. El sábado el presidente Gustavo Petro y varios oficiales militares visitaron a los niños en el hospital y publicaron las imágenes.
"Estoy en desacuerdo con eso. ¿Cómo van a coger a mis hijos como objetos de burla, si yo que soy el papá no estoy haciendo eso... para que otras personas que están totalmente bien aquí, comiendo y durmiendo bien, se vayan allá, los dejen ingresar, saquen fotos de mis hijos, las rieguen en redes sociales? Eso es injusto. Espero que Dios los perdone", ha agregado.
Además, Ranoque se ha lamentado porque no ha tenido ayudas durante el tiempo de la búsqueda que ha pasado en la selva y porque muchas personas que colaboraron ahora le piden dinero porque piensan que las autoridades le han dado una importante suma.
"Presidente respete nuestros principios como pueblo indígena. Espero que indemnice a todos los compañeros que estuvieron en la búsqueda. La verdad, yo no tengo ni un solo recurso para siquiera darles un tinto a mis compañeros", ha apuntado.
Los cuatro niños de la comunidad indígena Muinane, de Puerto Sábalo, viajaban con su madre, Magdalena Mucutuy Valencia, en un avión que se estrelló en la selva. La madre falleció en el accidente, pero los cuatro menores -de 13, 9, 4 años y un bebé que cumplió un año en la selva- lograron sobrevivir solos 39 días, hasta que fueron rescatados.