La detenida por el asesinato de Lola Daviet, niña de 12 años que fue encontrada degollada en un baúl en Francia, declaró ante la policía y dio a conocer detalles del crimen.
Según reportó New York Post con información de Agence France-Presse, Dahbia B en primera instancia admitió el asesinato y relató que arrastró a la joven estudiante "al departamento de su hermana".
Luego, la imputada dijo que se “duchó con el cadáver antes de cometer agresiones sexuales y otros actos de violencia contra ella” y “esconder el cuerpo en una caja”. Posteriormente, aseguró que se tomó un café y escuchó música antes de diseccionar el cuerpo de la víctima.
Además, manifestó que bebió la sangre de la víctima luego de ponerla en una botella, la que aún no ha sido hallada.
Todo el relato encaja con las pruebas encontradas en la autopsia.
Imputada se retracta del relato
Sin embargo, luego la sospechosa se retractó de lo que había declarado, indicando que había narrado un sueño y no la realidad.
También afirmó haberse defendido de un atacante misterioso y haber luchado contra un fantasma. Juró que jamás mataría a un niño.
Según la autopisa, Lola murió por "insuficiencia cardiorrespiratoria con asfixia y signo de compresión cervical". El examen reveló "múltiples lesiones" pero no "lesión traumática de la esfera sexual".
Otro sujeto de 43 años está siendo imputado por "ocultamiento de cadáver", mientras que cuatro personas que habían sido detenidas fueron liberadas sin cargos.