Conmoción existe en Estados Unidos tras la muerte de dos hermanos gemelos que se ahogaron en la piscina de su casa, mientras su madre le hacía clases a uno de sus hermanos al interior del inmueble.
Todo ocurrió la mañana del pasado 16 de marzo en el estado de Oklahoma, cuando Jenny Callazo descubrió a sus hijos de 18 meses, Locklyn y Loreli, que estaban al interior de la alberca familiar.
Rápidamente acudió al auxilio de los pequeños, pero sus corazones ya habían dejado de latir. A pesar de lo anterior, de igual forma fueron trasladados hasta un centro asistencial donde se certificó su fallecimiento.
El jefe de bomberos de Oklahoma, Scott Douglas, detalló a NBC que la madre "estaba dando clases en casa a un niño mayor mientras los más pequeños jugaban en el salón".
Además, explicó que "la abuela dejó la puerta trasera abierta, facilitando el acceso a la piscina" que no contaba con valla protectora en su perímetro.
Esto último está normado en el estado de Oklahoma, ya que las piscinas que se ubiquen en residencias deben mantener una reja que tenga una altura superior al metro, y que también tengan puertas de seguridad de cierre automático.
Por su parte, la capitana de la policía, Valerie Littljohn, aseguró que la investigación por las muertes de los pequeños "sigue abierta"
Cabe consignar que el ahogamiento es la principal causa de muerte accidental en niños de uno a cuatro años, de acuerdo con datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC).