La policía de Berlín, en Alemania, abrió una investigación contra el músico británico Roger Waters por posible incitación al odio después de que su espectáculo en la ciudad fuese condenado por el Ministerio de Exteriores israelí.
La vestimenta de estilo nazi con la que Rogers salió a escena es susceptible de "enaltecer" la violencia nacionalsocialista de una forma "hiriente para la dignidad de las victimas" y, por consiguiente, "alterar el orden público", declaró un portavoz de la policía a EFE.
La policía de Berlín inició una investigación criminal contra Roger Waters luego de su concierto en el que se vistió como un oficial nazi de las SS con una pistola y denigraba el asesinato de Ana Frank. pic.twitter.com/H25f8NjGwv
El cofundador de Pink Floyd vistió un abrigo negro y un brazalete rojo durante la interpretación de un tema en el que asume el personaje de un dictador.
Durante el espectáculo se proyectaron en las paredes los nombres de diversas víctimas de la violencia estatal, entre ellas la joven judía Anne Frank, asesinada en el Holocausto, y la periodista palestina Shireen Abu Akleh, que murió en 2022 por disparos de soldados israelíes.
Fue por ello que el Ministerio de Exteriores israelí acusó al músico británico de haber "ensuciado el recuerdo de Anne Frank y de los seis millos de judíos asesinados en el Holocausto".
Roger Waters: 'Todos somos humanos pero hay algunos (Judíos) que son humanos de forma distinta'. Un vídeo de menos de dos minutos que explica quién es Roger Waters, en sus propias palabras.
Críticar a Israel es legítimo y defenderlo también, pero no se puede avalar el… https://t.co/wX4jGy0cvC
En versiones anteriores del espectáculo, Waters había hecho ascender sobre el escenario un globo con forma de cerdo con el símbolo de la estrella de David, que en esta ocasión se vio sustituido por los nombres de empresas armamentísticas.
La gira de Waters por Alemania ha sido objeto de duras críticas por parte de asociaciones judías, quienes convocaron protestas delante de los conciertos, y de las autoridades municipales de diversas ciudades, que han hecho todo lo posible por evitar las actuaciones.
Así, el Ayuntamiento de Frankfurt rescindió el contrato de Waters para actuar en la sala de conciertos municipal el próximo 28 de mayo, y le acusó de ser "uno de los antisemitas de mayor proyección del mundo".
No obstante, un tribunal falló a favor del músico, que había recurrido la decisión, con el argumento de que no hay indicios de que Rogers haya incurrido en ningún delito penado y que por ello su actuación está cubierta por el principio de la libertad artística.