Click acá para ir directamente al contenido

Letonia se prepara para restringir el empleo del ruso en el ámbito laboral

El proyecto de ley pretende "mitigar los efectos de la rusificación a largo plazo y erradicar la práctica cotidiana de emplear tanto el letón como el ruso en la comunicación diaria"

EFE

Domingo 21 de agosto de 2022

El Gobierno de Letonia tiene previsto aprobar la semana próxima una ley para restringir el empleo del ruso en los sectores público y privado y en el comercio, en el marco de un creciente antagonismo hacia Rusia y lo ruso por la invasión de Ucrania.

El borrador de la ley, que será presentado este lunes a los socios de coalición del primer ministro centroderechista Krišjānis Kariņš, se marca como objetivo aplicar en la práctica el resultado del referéndum de 2012 sobre el uso del ruso.

Entonces, un 74,8 % de los letones se pronunció en contra de reconocer como lengua oficial el ruso, que según datos de 2019 de la Oficina Central de Estadística Letona (CSB) es el idioma nativo de un 37,5 % de los ciudadanos, muchos de ellos descendientes de trabajadores instalados en el país báltico por las autoridades soviéticas.

El proyecto de ley pretende "mitigar los efectos de la rusificación a largo plazo y erradicar la práctica cotidiana de emplear tanto el letón como el ruso en la comunicación diaria en el entorno de trabajo y en los servicios".

La prohibición de facto de usar el ruso se extenderá no sólo a los organismos públicos, sino también, entre otros, a la comunicación con los clientes de compañías como bancos y empresas de telecomunicaciones, al transporte público, las infraestructuras como aeropuertos y estaciones e incluso al servicio de recogida de basuras.

La ley no impediría, por el contrario, el uso del ruso en conversaciones individuales en un comercio o el empleo de intérpretes para interactuar con la administración pública; además, se hará una excepción para emergencias o situaciones de riesgo.

En cuanto al entorno de trabajo, la ley afirma que "el empleador tendrá prohibido demandar que el empleado conozca o use un idioma (...) que no sea un idioma oficial de la Unión Europea", con lo que se pretende evitar que el ruso sea un requisito para acceder a determinados puestos.

Está previsto que la ley entre en vigor el 1 de julio de 2023 y quienes la infrinjan podrán ser sometidos a sanciones administrativas que todavía están por especificar.