La Policía siria ha confirmado que una bomba ha hecho explosión este sábado en una zona de seguridad de la capital del país, Damasco, sin dejar por ahora muertos ni heridos.
La bomba ha estallado dentro de un vehículo en la plaza de Al Huda, en el barrio damasceno de Mezzeh, donde viven asesores de las Guardias Revolucionarias de Irán o altos cargos milicianos de grupos armados palestinos como Yihad Islámica, considerados por Israel como organización terrorista y se encuentran las misiones diplomáticas de Líbano e Irán.
Fuentes del mando de Policía de Damasco han informado a la agencia oficial de noticias siria, SANA, que la explosión solo ha dejado "daños materiales".
La detonación tiene lugar una semana después del ataque contra el Consulado de Irán en la capital siria, que dejó al menos 16 muertos, la mayoría asesores de seguridad iraníes. Irán atribuyó inmediatamente el ataque a Israel y anunció inminentes represalias que han puesto a la comunidad internacional en alerta.