La justicia egipcia ordenó prisión preventiva por 15 días para Mohamed Mursi por presuntos vínculos con el grupo palestino Hamás. El depuesto presidente de Egipto está acusado por perpetrar acciones enemigas contra el país y asaltar la prisión de Wadi Natrun, al norte de El Cairo.
También se le imputan los cargos de asesinar a algunos presos y oficiales de la policía, facilitar la huida de otros reclusos, destruir documentos del presidio y asaltar comisarías.
La decisión estuvo a cargo del juez Hasan Samir, quien adoptó esta medida luego de interrogar a Mursi sobre las pruebas presentadas en el caso.
En la actualidad, Mursi mantiene un paradero desconocido pues permanece retenido por el ejército tras el golpe militar que lo depuso el 3 de julio. Desde esa fecha, la fiscalía emitió varias órdenes de arresto contra dirigentes de los Hermanos Musulmanes y su líder Mohamed Badía, por su supuesta responsabilidad en actos de violencia.
Según Ismail Haniye, jefe del Gobierno islamista de Hamás en Gaza, no existe implicación de su movimiento en Egipto, y solicitó a la prensa no expandir rumores por falsas responsabilidades.