Los cambios en Ucrania siguen produciéndose a ritmo vertiginoso.
La abrupta salida de Viktor Yanukovich de la presidencia fue calificada hace pocos días como el triunfo de los proeuropeos, pero no tardó en llegar la reacción de la población pro rusa, mayoritaria en el este del país (junto a la frontera con Rusia) y la república de Crimea.
En un tiempo récord, fuerzas rusas se infiltraron en este territorio bañado por las estratégicas aguas del Mar Negro y pronto quedó claro que Moscú iba a dirigir el futuro de Crimea.
Pese a los reclamos internacionales y e ir en contra de la Constitución de Ucrania, los crimeos votaron este domingo de forma abrumadoramente mayoritaria a favor de integrarse a Rusia, en un polémico referéndum que fue rechazado por las principales potencias de Occidente.
Según los resultados oficiales, un 96,77% de los votantes de Crimea apoyaron la idea incorporarse al país gobernado por Vladimir Putin.
Este lunes, el parlamento de la república ucraniana no perdió tiempo, declaró de forma unánime la independencia de la región autónoma y solicitó formalmente unirse a Rusia.
La página de web del Congreso de Crimea informó, que hicieron "una propuesta a la Federación Rusa para admitir a la República de Crimea como nuevo sujeto con el estatus de una república".
Este paso, se sumaría al arribo de una comisión oficial a Moscú que discutiría os procedimientos requeridos para que la península del Mar Negro se convierta en parte de la Federación Rusa.
OCCIDENTE RECHAZA RESULTADOS
Mientras en Crimea celebran los resultados, las principales potencias de occidente se unieron para declarar ilegal la votación y advertir de sanciones contra Rusia si acepta a la república ucraniana como parte de su territorio.
El presidente Barack Obama dijo, en una conversación telefónica con Vladimir Putin, que Estados Unidos rechaza el resultado del referéndum.
"Obama enfatizó que las acciones de Rusia violan la soberanía y la integridad territorial de Ucrania y que, en coordinación con nuestros socios europeos, estamos preparados para imponer costos adicionales a Rusia por sus acciones", declaró la Casa Blanca a través de un comunicado.
Obama dijo a Putin que la crisis aún podía resolverse a través de la diplomacia, pero afirmó que primero las fuerzas militares rusas deben detener sus "incursiones" en Ucrania, según informó la Casa Blanca.
Desde Naciones Unidas, declararon de manera preliminar que la votación "no puede tener validez ni servir de base para alterar en modo alguno el estatus de Crimea".
Asimismo, advirtieron que "todos los estados y organizaciones internacionales que no reconozcan ninguna alteración del estatus de Crimea a partir de este plebiscito".
La Unión Europea (UE), en tanto, también condenó los resultados y declaró que eran ilícitos. Además, anunciaron que sancionarán a Rusia si persiste con las intenciones de incorporar a Crimea en su territorio.
"El referéndum es ilegal e ilícito y sus resultados no serán reconocidos", dijeron en un comunicado conjunto, Herman Van Rompuy, presidente del Consejo Europeo y José Manuel Barroso, presidente de la Comisión Europea.
Se espera que los cancilleres de la UE se reúnan este lunes para discutir la crítica situación en Crimea que pone una vez más Rusia en una batalla por anexar un territorio perdido tras la caída de la Unión Soviética.
La última acción de este tipo fue en 2008, cuando Putin ordenó invadir Georgia y tomó el control de dos regiones separatistas sin oposición internacional.