Autoridades ambientales de Argentina investigan el origen de una gran cantidad de cadáveres de cóndores, animales domésticos y de un puma en la provincia de Mendoza.
Los restos fueron descubiertos por un grupo de personas que hacían trekking y que dieron inmediato aviso a los organismos correspondientes luego de encontrarse con los restos de las criaturas, que presentaban signos de estar quemados y estaban agrupados en una pila.
El hallazgo fue hecho, además, en un área protegida a más de 3 mil metros de altura.
Una de las teorías apunta al uso ilegal de veneno para proteger el ganado de los carnívoros más grandes, como pumas y zorros. Se coteja la posibilidad de que alguien haya dejado veneno y asesinado a los animales, ya que ese tipo de cebos también atrae a cóndores.
Tras el descubrimiento la policía realizó un allanamiento y detuvo a una persona. También se informa que en poder de ese sujeto había químicos sospechosos de ser veneno.