Perú ha ordenado la evacuación de los poblados cercanos al volcán Ubinas, al sur del país, tras decretarse alerta naranja por el aumento de su actividad. Unas 4.000 personas deberán abandonar sus casas para buscar refugio en albergues y pueblos cercanos.
El coordinador del Observatorio Vulcanológico del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet) de Perú, Jersi Mariño, ha informado que la "alerta naranja" obliga a evacuar a los habitantes de poblados como Querapi o Tonohaya.
La caída de ceniza se ha dispersado en un radio de 20 km alrededor del volcán, afectando a los centros poblados de Querapi, Ubinas, Sacohaya, Tonohaya, Yalagua, Lloque, Matalaque, San Juan de Tarucani, Titi, Para y Chojata; áreas de cultivo y pastos naturales, según informó el Instituto Geofísico del Perú (IGP).
Estas recomendaciones se han formulado a través de un comunicado, teniendo en cuenta que Tonohaya, donde hay 80 viviendas y viven 189 personas, se sitúa en una zona "de alto peligro volcánico", tal y como informa la agencia de noticias estatal, Andina.
El jefe del IGP de Arequipa, Orlando Macedo, detalló que las explosiones son más frecuentes y con mayor intensidad, como la registrada el pasado 13 de abril, que alcanzó los 5 mil 500 metros de altura y una fuerza de 4 mil 144 megayuls.
Los organismos advirtieron de que si ocurriera un flujo de lodo o de materiales volcánicos afectaría a Tonohaya, ya que es "el pueblo más cercano al volcán dentro del valle de Ubinas”
Las cenizas del volcán continúan dispersándose hacia el norte y afectando a las poblaciones limítrofes entre Moquegua a Arequipa. Como consecuencia, el personal del Centro de Operaciones de Emergencia del Ministerio de Salud ha tenido que atender a cerca de 40 personas.
Los afectados presentaban un diagnóstico de conjuntivitis, infecciones respiratorias agudas y problemas estomacales y han sido finalmente atendidos en los centros instalados en la localidad de Sacohaya, en el distrito de Ubinas.