Tras permanecer varias horas parapetado al interior de una vivienda en el barrio de Inglewood, en Los Ángeles (California, EE.UU.), la policía local logró detener al pistolero que protagonizó un tiroteo la tarde de este miércoles.
Según el reporte de la prensa local, el hombre se rindió luego de mantener secuestrada a su novia y a su hija, además de enfrentarse a tiros con la policía.
El hombre armado estaba vestido con un chaleco antibalas que le salvó la vida, luego que efectivos de seguridad le dispararan para matarlo.
El responsable del incidente fue arrestado por la policía, donde fue confirmado que tiene antecedentes policiales.
El tiroteo generó una gran alerta en el barrio, que se transformó en una verdadera zona de guerra según el relato de testigos.
Las víctimas se encuentran en manos de la policía.
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