En medio de la polémica que existe respecto al uso de fuerza policial en Estados Unidos, un video expone las consecuencias emocionales que sufren los funcionarios de seguridad cuando cuestionan su labor.
Las imágenes muestran al oficial Grant Morrison, de la ciudad de Montana, quien en abril del 2014 disparó y dio muerte a un sospechoso que resultó estar desarmado.
El individuo fue identificado como Richard Ramírez, de 38 años, quien era adicto a la metanfetamina.
En el video se aprecia al oficial caminado en la escena y retornado al vehículo policial que continúa grabando lo que sucede.
En ese momento, y una vez que el policía se detiene frente al auto, comienza a llorar. Luego, uno de sus colegas lo abraza y le preguntas: “¿estás herido?”
Luego, el oficial le responde: “Pensé que iba a sacar un arma. No sé lo que pasa”.
El resultado de la investigación el oficial Morrison explicó lo que pasó por su cabeza cuando disparó a un hombre, cuando pensó que tomaría una pistola, que en realidad era un cinturón de pantalón.
“Supe en ese momento, lo que luego resultaría ser mentira, que él iba a tomar un arma. No podía arriesgarme… quiero ver a mi hijo crecer”, dijo.
Según reportó el DayliMail, Ramírez se encontraba sentado en la parte trasera de su auto con otras personas al frente. Cuando ocurrieron los hechos.
El oficial Morrison fue liberado de toda culpa, tras comprobarse que había actuado de manera justificada.
Foto: Reproducción/Youtube