Las protestas planificadas por la convención republicana realizada en Tampa nunca se materializaron debido en parte a una tormenta tropical, pero los activistas esperan una gran manifestación la próxima semana cuando los demócratas se reúnan para nominar oficialmente a su candidato en Charlotte.
Si la marcha del domingo en Charlotte fue un indicador, esas predicciones podrían estar erradas. La policía informó que entre 800 y 1.000 manifestantes marcharon por la ciudad, mucho menos que los miles proyectados por algunos para protestar contra todo, desde grandes bancos a la deportación de inmigrantes.
Los cerca de 80 grupos que componen la Coalición para Marchar por Wall Street Sur realizó el domingo una marcha de 5 kilómetros que tenía como objetivo destacar a Charlotte como el segundo mayor centro financiero de Estados Unidos, sólo superado por Nueva York.
Los activistas se detuvieron frente a la sede de Bank of America y de la empresa de energía Duke Energy para hablar contra lo que ven como una gama de injusticias, incluyendo ejecuciones de hipotecas y altas deudas por préstamos estudiantiles.
Los organizadores esperaban que participaran varios miles de personas, incluyendo a algunos miembros de la coalición que estuvieron involucrados en acciones mucho menores la semana pasada en Tampa durante la convención en la que los republicanos nominaron a Mitt Romney como su candidato presidencial.
El domingo, manifestantes que llevaban pancartas y botellas de agua se reunieron en un día caluroso y húmedo, mientras los organizadores afirmaban que no estaban decepcionados por la multitud menor a la esperada.
"Estamos felices con la asistencia", aseguró Bryan Perlmutter, de 21 años, un estudiante universitario de Carolina del Norte que ayudó a organizar el evento. "Estamos aquí para manifestar las demandas del pueblo", agregó.
El capitán Jeff Estes del Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg dijo que el evento se desarrolló sin incidentes, con sólo un arresto cuando la marcha llegaba a su fin.
"Esto es la Constitución en la práctica. La gente salió a ejercer su (derecho a la) libertad de expresión", comentó.
El FBI había advertido de la posible acción de anarquistas en Tampa, pero las protestas allí fueron pequeñas, pacíficas y se vieron abrumadas por los miles de oficiales de seguridad de ese país.
La manifestación del domingo en Charlotte pretendía ser no violenta y apta para la familia, dijo Ben Carroll, un organizador voluntario.
Representantes de Bank of America y Wells Fargo han dicho que los bancos tienen en marcha planes para reducir al mínimo las interrupciones en sus operaciones por la convención demócrata, que se espera que atraiga a cerca de 35.000 personas a la ciudad más grande de Carolina del Norte.
Ambos bancos cerrarán algunas sucursales cerca de donde se realizará la convención en Charlotte y los empleados trabajarán desde lugares alternativos o desde sus casas.
Bank of America cuenta con 15.000 empleados en el área de Charlotte, mientras que Wells Fargo con unos 20.500.
Aumento de la seguridad
A diferencia de Tampa, los funcionarios en Charlotte tienen que lidiar con la visita a la ciudad del presidente en funciones, así como también con eventos clave de la convención que tendrán lugar en dos sedes en vez de sólo una.
La convención demócrata comenzará el martes en el Time Warner Cable Arena, con capacidad para cerca de 20.000 personas.
El jueves, cuando hablen el presidente Barack Obama y el vicepresidente Joe Biden, la convención se trasladará a un escenario al aire libre, al Bank of America Stadium, un recinto con capacidad para casi 74.000 personas y a 1,5 kilómetros d distancia del Time Warner Cable Arena.
El Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg casi doblará el tamaño de su contingente a 1.760 oficiales, para lo que llevará a agentes de otras jurisdicciones para que ayuden con la seguridad durante la convención, dijo el alcalde Anthony Foxx.
Varios cientos de miembros de la Guardia Nacional del estado apoyarán la seguridad y cerca de 2.000 más estarán disponibles para asistencia en caso de que sea necesario, afirmó el portavoz de la Guardia Nacional, teniente coronel Robert Carver.
[Agencia Reuters]