La policía francesa debió abatir a un hombre que intentó ingresar a una comisaría local armado con un cuchillo.
De acuerdo a medios internacionales, el protagonista debió ser abatido por los uniformados galos, ya que además portaba un cinturón de explosivos.
Asimismo, el hombre, antes de morir, habría gritado "Alá es grande", situación que lo posicionaría dentro de los seguidores de grupos radicales que han ejecutado diversos ataques a París.
De hecho, hace un año la revista Charlie Hebdo fue el blanco de una violenta intervención matando a periodistas e ilustradores. Junto a ello, aún se mantienen las medidas de seguridad por los atentados del 13 de noviembre en plena capital francesa, en donde murieron 130 personas.