El príncipe William de Inglaterra se reunió el lunes con el presidente de China, Xi Jinping, a quien entregó una invitación para visitar Reino Unido, antes de visitar la Ciudad Prohibida de Beijing en un viaje destinado a mejorar las relaciones diplomáticas.
La visita de William es la de mayor jerarquía de la corona británica desde 1986, año de la última visita de la reina Isabel II y su esposo, el príncipe Felipe.
"Hacía muchos años que tenía interés en venir a China", dijo William, recibido por Xi en el Gran Palacio del Pueblo de Beijing.
Buckingham Palace inició a mediados de febrero una campaña de seducción de cara a China, con la difusión de un vídeo en el que William, segundo en la línea de sucesión a la corona británica, mandaba un saludo en mandarín para desear un feliz Año Nuevo Lunar.
Xi, quien ofreció una cálida acogida, felicitó a William, de 32 años, que en abril próximo va a ser padre por segunda vez y envió sus saludos a Kate, la esposa del príncipe, que no pudo acompañarlo debido al embarazo.
Después de Beijing, el príncipe británico viajará a Shanghai, capital económica de China, y luego visitará un santuario de elefantes en la provincia de Yunnan (suroeste), donde pronunciará un discurso en defensa de las especies protegidas.
China, muy criticada por su importante papel en el contrabando internacional de marfil, anunció el pasado jueves la prohibición durante un año a la importación de marfil esculpido.
"La familia real británica tiene una gran influencia no sólo en Gran Bretaña sino en todo el mundo", dijo Xi, que tiene previsto un viaje al Reino Unido a fines de año.
En este sentido, el príncipe William entregó al jefe de Estado chino una carta con una invitación oficial de la reina Isabel II a visitar el país.
La visita de William busca mejorar las relaciones de China con Reino Unido, afectadas por las manifestaciones prodemocracia ocurridas en 2014 en Hong Kong, ex colonia británica.
El padre de William, el príncipe Carlos, primer heredero del trono, nunca visitó China continental, aunque fue el representante de la corona en las ceremonias de retrocesión de Hong Kong.
Fuente: AFP
Foto: Reuters