La Audiencia Nacional de España ha dictado prisión provisional para los dos ciudadanos chilenos, Francisco Javier Solar Domínguez alias "Cariñoso", de 34 años, y Mónica Andrea Caballero Sepúlveda, alias "Moniquita", de 25 años, detenidos el pasado miércoles por su relación con los ataques con explosivos contra la Basílica del Pilar de Zaragoza y la Catedral de la Almudena en Madrid.
Ambos acusados, junto otros tres detenidos, han declarado este domingo ante el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, que les imputa la comisión de delitos de pertenencia a organización terrorista, estragos y la conspiración para la comisión de estragos en la Basílica de Monserrat de Barcelona, y les ha mando a prisión provisional y sin fianza.
La Policía Nacional arrestó a estos dos ciudadanos chilenos el pasado miércoles de madrugada en la vivienda que ocupaban en el barrio del Carmel de Barcelona, junto a una mujer italiana llamada Valeria Giacomoni y la pareja formada por el argentino Gerardo Damián Formoso y la también chilena Rocío Yune, quienes han quedado en libertad condicional.
Los cinco están vinculados con el grupo anarquista "Comando Insurreccional Mateo Morral", que reivindicó ambas acciones contra los populares templos en Madrid y Zaragoza. Para el Ministerio del Interior de España, se trata de "un comando anarquista muy bien organizado, extremadamente peligroso y con fuertes relaciones internacionales".
Autoridades hispanas aseguran que el pasado 2 de octubre, los detenidos se dirigieron a Zaragoza en transporte público llevando consigo en una bolsa el artefacto explosivo que luego colocaron en la Basílica del Pilar, el cual activaron produciendo cuantiosos daños en el interior de este templo y provocando heridas de diversa consideración a una persona.
Según el diario El País, el último informe policial constata que en los últimos 12 meses los anarquistas han estado tras siete atentados o tentativa.
Además de las dos bombas en templos católicos (el Pilar y La Almudena);han enviado dos artefactos por correo a una gestoría (12 de septiembre) y al banco italiano Mediolanum (19 de ese mes), ambas en Barcelona; y enviaron otro simulado a Valencia (el 9 del mismo mes). A ellos se suman los dos consoladores con explosivos enviados a finales de 2012 contra el director de un colegio de los Legionarios de Cristo en Madrid y al arzobispo de Pamplona.