Una escena que conmovió a muchos ocurrió en Canadá, tras la llegada de un buque de guerra con sus marineros luego de una extensa gira por el Caribe y el Pacífico Oriental. Antes de llegar al puerto de Victoria, los tripulantes hicieron un tradicional sorteo donde el ganador se adjudica el derecho de ser el primero en bajar a tierra y reencontrarse con su familia.
Bajo esa premisa, y luego de pasar ocho meses en alta mar a bordo del HMCS Winnipeg, el marinero Francis Lagaré logró el premio mayor y bajó del buque antes que sus compañeros. Entonces se acercó a su pareja, Corey Vantour, y de inmediato ambos hombres se fundieron en un largo beso y abrazo que fue captado por decenas de cámaras de fotos y video.
Tras el conmovedor saludo, Legaré sólo atinó a declarar que "he estado fuera durante 255 días y esto se siente muy bien. Estoy sin palabras".
La Marina Real Canadiense entendió la repercusión mediática del encuentro y reflexionó al respecto señalando que "somos un reflejo de la sociedad y nosotros reclutamos a gente que vive en esta sociedad", según palabras del contraalmirante Gilles Couturier, comandante de la Marina de Guerra del Pacífico, a CBC News. El militar fue entonces claro y contundente en su veredicto: "Si no nos adaptamos, no vamos a tener marineros que quieran enrolarse".