Con el objetivo de castigar a aquellos que que visiten reiteradamente portales extremistas en Internet o viajen al extranjero para recibir adoctrinamiento o entrenamiento en el uso de armas, el gobierno de Nicolás Sarkozy, presentó un paquete de medidas para luchar contra el terrorismo en el país. Las nuevas normas surgen a casi un mes de los asesinatos perpetrados por el presunto extremista islámico Mohamed Merah, al sur de Francia en Toulouse.
Las propuestas serán enviadas al Parlamento, donde podrían no ser vistas con buenos ojos por parte de los socialistas, quienes dicen que el arsenal legal de Francia contra el terrorismo ya es lo bastante fuerte y que las propuestas son una maniobra de campaña para impulsar a Sarkozy, con problemas para lograr la reelección en las elecciones presidenciales que se realizarán el próximo 22 de abril.
El gobierno conservador insiste en que las medidas son necesarias para combatir el relativamente nuevo fenómeno de terrorismo a manos de individuos que se radicalizan por sí mismos en sitios de Internet yihadistas, y que son difíciles de detectar.
Las medidas propuestas surgen en una atmósfera de tensión política por las elecciones legislativas y presidenciales que se realizarán en Francia en las próximas semanas. Incluso los autores de la propuesta admiten que quizás no sea adoptada antes de que los comicios den nueva forma a la Asamblea Nacional en junio, y en los que se espera que los socialistas obtengan buenos resultados.
"Nos gustaría que se aprobaran estas medidas antes de la elección presidencial", dijo la portavoz del gobierno Valerie Pecresse.