El presidente de Ucrania, el pro ruso Viktor Yanukovich, ya decidió el futuro del país.
Pese a las presiones externas y al reclamo social, el mandatario no firmó el acuerdo comercial con la Unión Europea (UE), considerado la llave para formar parte en el futuro del selecto grupo de países del conglomerado.
Según trascendió en la prensa internacional, Rusia, principal socio comercial del país y antigua potencial colonial, motivó la negativa ucraniana, con el objetivo de impedir que la UE continúe fortaleciendo lazos con los ex países miembros de la Unión Soviética.
La firma del tratado iba a ser oficializada en una cita bilateral de los líderes de la región, realizada en Vilna, capital de Lituania.
Yanukovich -conocido por su histórica inclinación hacia Rusia- asistió de todas maneras a la reunión, a pesar de no haber firmado el acuerdo de cooperación con la UE.
En la visita, el mandatario ucraniano propuso iniciar negociaciones a tres bandas entre Rusia, Ucrania y la UE, e instó a Bruselas a que ayude a Kiev a suavizar los términos de un posible préstamo del Fondo Monetario Internacional, dijo un diplomático europeo a la agencia Reuters.
Pero la UE rechazó las negociaciones trilaterales y dijo que Yanukovich debe comprometerse a firmar el acuerdo, algo que él se negó a hacer.
"Él debía dar ese salto de fe que no estaba preparado a dar", dijo el diplomático.
La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que ella no tenía esperanzas de que la UE y Ucrania puedan lograr un acuerdo en la cumbre en Vilna, que termina el viernes, pero dijo que la puerta sigue abierta para Kiev.
En tanto, cientos de manifestantes se reúnen en las principales avenidas de la capital ucraniana, para reclamar a favor del tratado y de la posible entrada del país a la UE.