Los síntomas eran evidentes: boca seca, nerviosismo, largas pausas. Marco Rubio no soportó la presión de ser el encargado de dar la réplica al discurso del presidente de los Estados Unidos, Barack Obama.
En un instante maldito, el senador se dejó vencer por la presión y se agachó fuera de cámara para echar un trago de agua. Un gesto, claro está, que fue inmediatamente objeto de miles de comentarios en las redes sociales, y bautizado como “watergate”.
Este senador republicano de origen hispano tiene reputación de buen orador en inglés y español, y tener gran capacidad de improvisación. Sin embargo, ante un telepromter y en directo por la televisión, sus facultades se vieron mermadas.
Apenas fueron segundos lo que tardó en poder hidratarse e intentó hacerlo sin dejar de mirar a cámara. Pero el detalle fue instantáneamente convertido en mofa a través de Twitter.
Lo que sí demostró el senador al final de la noche es tener un gran sentido del humor. Tras ver la reacción de los internautas, Rubio colgó en su cuenta de Twitter (@marcorubio) la imagen de la botella de agua mineral que eclipsó sus palabras en su noche más importante.