El abogado de Cristian Canales, el padre de Emmelyn, la niña de once años que se mantuvo alejada durante ocho días de su familia en Licantén tras un presunto secuestro por parte de José Navarro, criticó en duros términos los cuidados recibidos por la menor.
Recordemos que la niña tras ser encontrada en buenas condiciones de salud, su progenitor interpuso una medida de protección ante el Juzgado de Familia de Licantén, con el objetivo de obtener su cuidado personal provisorio y luego definitivo. Con esto, pretende resguardar la integridad e intereses de su hija, ya que considera que los cuidados recibidos no son los deseables.
El abogado de Canales, Víctor Bahamondez, señaló a La Tercera que, pese a que el abuso sexual contra la menor en 2016 se encuentra en etapa de acusación, no tienen la certeza de que anteriormente la menor fuera vulnerada de otra manera.
"Hay una causa que es de connotación pública, pero son hechos que vienen desde el año 2016 o incluso antes. Si en el 2016 ocurren hechos de abuso, para mí pueden venir hechos anteriores que no han salido a la luz. En ese entonces, además, la familia materna demostró falencias en cuanto al cuidado, lo que queda demostrado en que ni la madre, ni el tío ni ningún familiar materno quiso hacer la denuncia en contra de la pareja de la hermana de la madre de la menor", aseguró.
Sumado a ello, enfatizó que estas falencias quedan en evidencia cuando los abuelos de la niña creyeron que podían encontrar junto a José Navarro un tesoro escondido. "Por qué permitieron que saliera con el abuelo y Navarro si les parecía alguien extraño. Lo que buscaba la familia no era el bienestar de la menor, era bienestar el económico de ellos. Si no querían nada del tesoro, para qué lo van a buscar. Si una persona no busca dinero, para qué va a ir, para qué se van a exponer", detalló.
Además, el profesional exhibió sus reparos frente al rol de las instituciones en este caso. "Una vez que se el caso se hizo público, el Programas de Representación Jurídica (PRJ) de Hualañé presenta una medida de protección en base a la vulneración de la menor, por el tema del secuestro. Cuando aparece la menor, el Tribunal de Letras de Licantén, la decreta como curadora, designando a una abogada que se hace cargo de la representación de la menor ante el tribunal", arguyó.
La niña actualmente se encuentra en oficinas de protección de víctimas y de testigos junto a su madre, donde el abogado aseguró que en ese lugar tampoco se garantiza el resguardo de la menor. "No sé hasta qué punto va a funcionar esa oficina. Si uno está en ese lugar es para que te protejan, ahora con quién sale, quién la acompaña. Es una causa de connotación pública, exponer a la menor hoy, sin un tratamiento psicológico, no nos parece", sentenció.