Provistos de carpas y ropa gruesa para el frío, llegaron apoderados a pernoctar a las afueras de un colegio, en la comuna de Peñaaflor.
No se trata de una protesta, sino de la desesperación por mantener un cupo en el establecimiento para que sus hijos continúen sus estudios el próximo año.
El pasado 2 de diciembre, los padres del colegio particular Augusto D'Halmar se enteraron de que el recinto disminuiría su matrícula de 58 alumnos a 40.
A su juicio, la medida se informó con poco tiempo de anticipación, impidiéndoles buscar un nuevo establecimiento educacional.
Foto: TVN