Juan Barros, afectado en el último tiempo de problemas de salud, reapareció este martes en un actividad de la diócesis de Osorno que tuvo como principal tema a tratar la inminente visita de los enviados del Papa Francisco para investigar los casos de abuso sexual.
El lugar del encuentro entre el obispo y sus colaboradores fue la casa de ejercicios Betania de las monjas carmelitas descalzas, donde se comenzaron a afinar detalles de la llegada del obispo Charles Scicluna y monseñor Jordi Bertomeu.
Barros recalcó tras la jornada que "no ha aparecido el programa (de la visita) confirmado todavía, estamos rezando para que sea un momento muy positivo".
Respecto a su estado de salud, contó que "he estado en un tiempo con reposo médico, pero gracias a Dios estoy caminando y agradecido de mucha gente que reza (...) y compartiendo este tiempo de dolor, oración y de esperanza de nuestra iglesia".
Consultado sobre su renuncia a su cargo, insistió en que "estamos todos siempre disponibles a las decisiones del santo padre".