A primera hora de este miércoles, efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros llegaron hasta acceso por la calle Obispo Umaña de la Universidad de Santiago (Usach) para iniciar el desalojo de las instalaciones.
En el operativo fueron detenidas cinco personas.
Este martes, y tras el ultimátum del rector Juan Manuel Zolezzi, fueron funcionarios de la propia casa de estudios quienes allanaron las dependencias universitarias, no encontrando estudiantes, es decir, "una toma fantasma".
Pero, según informaron los propios estudiantes, este operativo no fue en toda la universidad y el Campus Aberlardo Núñez permaneció tomado.
Los propios alumnos agregaron que tras ese desalojo el rector envió una carta en donde comunicaba que el miércoles se reanudaban las actividades normales en la universidad.
Hasta el cierre de esta nota, rectoría de la Universidad de Santiago no ha emitido una versión oficial sobre si autorizó un nuevo desalojo del campus.
Vehículos de Fuerzas Especiales en las afueras de la Usach.
DECLARACIONES CRUZADAS
Antes del desalojo del martes, hubo una serie de declaraciones cruzadas entre el rector y la federación de estudiantes de la casa de estudios, incluso algunos carteles ubicados en la universidad pedían la salida de la autoridad universitaria.
Zolezzi envió una carta a la comunidad explicando que se requería "disponer de las instalaciones".
Agregó que en caso de no entregarse las dependencias, "entenderemos que se ha rechazado el diálogo propuesto, y que no les interesa lo que ocurra a sus compañeros".
Ante esto, la federación respondió con un comunicado donde señalaron que "por ningún motivo nos dejaremos amedrentar por amenazas concretas ni tampoco ultimátum".
Cabe señalar que para este 11 de julio se convocó a un paro nacional, movilización en la que participarán los estudiantes, funcionarios públicos y trabajadores.