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Carmen Fernández se defiende

La ex directora de la Onemi culpa al SHOA de lo ocurrido el 27-F y critica las evacuaciones preventivas que se realizan.

Fabián Mardones

Sábado 12 de mayo de 2012

En entrevista con La Tercera, la ex directora de la Oficina Nacional de Emergencia (Onemi), Carmen Fernández, se defendió de las críticas surgidas por su actuación luego del terremoto 8,8° Richter que afectó a la zona central de nuestro país el 27 de febrero de 2010 y que la llevó a un proceso de formalización que se prolongó por cuatro días durante esta semana.

Junto con lamentar cada una de las muertes que se produjeron, Fernández negó que la ex Presidenta Bachelet le haya enviado un correo electrónico de apoyo como señalaron algunos medios de comunicación.

Añadió que se ha sentido perseguida políticamente y realzó su labor al frente del organismo ya que “recibí la Onemi con $ 905 millones al año y 59 funcionarios y la dejé con más de 200 empleados y $ 6 mil millones al año”.


Sobre su participación aquella madrugada en la fallida alerta de tsunami a la población, negó que haya sido informada de un fax del Servicio Hidrográfico y Oceanográfico de la Armada (SHOA) que daba cuenta de la alerta de maremoto mientras se encontraba camino a la Onemi.

Reafirmó que el fax que recibió a su llegada “decía que era probable que hubiese un tsunami, pero que el SHOA ya había levantado la alerta”. Remarcó además “la ambigüedad del comunicado” y que del organismo de la Armada informaron que “no había variaciones de mareas”. Contó además, que lo primero que le dijeron a su llegada a la Onemi fue que “por radio personal del SHOA informó que no había probabilidad de tsunami porque el epicentro era en tierra”.

Agregó que 50 a 55 minutos después del terremoto le señalaron que su magnitud era 8.3° y que le pareció suficiente para evacuar, comentándole la situación al ex subsecretario del Interior Patricio Rosende, quien le confirmó que la Armada había descartado el tsunami, información que fue ratificada en medios radiales, por lo que el maremoto “dejó de ser prioridad” para ella.

Reconoció además que en tanto conoció la magnitud del sismo (8,3° Richter) le pareció necesario evacuar las ciudades costeras, pero que “el SHOA ya había descartado el tsunami”, lo que califica como “la génesis del problema” y recalca que lo de Juan Fernández jamás se pudo haber evitado porque la Armada “nunca consideró al archipiélago dentro de los riesgos de tsunami”. Remarcó que una vez informada por Carabineros, decidió enviar personal por mar y aire a las islas y que en ese momento dejó de creer en el SHOA y que no “sabía lo que estaba pasando en el borde costero”.

En la conversación con el matutino, Fernández se arrepiente de depositar toda su confianza en el SHOA, ya que el organismo “no poseía estructuras tecnológicas para soportar un sismo de esa naturaleza”.

Criticó también las evacuaciones preventivas que realiza la actual gestión, ya que se han convertido en un chiste porque “se va a producir lo del niño y el lobo. Van a evacuar tanto innecesariamente, que cuando sea realmente necesario, la gente no lo va a creer y no va a salir y se va a morir”, sentenció.

Finalmente, defendió a la ex Presidenta Michelle Bachelet que “merece quedar fuera del proceso de formalización porque fue mal asesorada” por ella y Rosende. Asimismo, llamó a “recoger lecciones de lo sucedido” y a no utilizar políticamente lo ocurrido esta semana.