Los siete imputados por el denominado caso Antares de la Luz no cumplirían sus penas en la cárcel de acuerdo a los antecedentes mostrados por la defensa y que fueron postulados en el inicio del juicio abreviado efectuado esta mañana en el Tribunal de Garantía de Quilpué.
Según explicaron los abogados de los implicados, la instancia judicial consta de una negociación entre las partes con el fin de llegar a un acuerdo que culmine las diligencias.
Además, sostuvieron que dos de los protagonistas, Pablo Undurraga y Natalia Guerra, arriesgan cinco años de pena remitida, mientras que los cinco actores restantes podrían recibir tres años en la misma calidad.
Pero ante la carencia de antecedentes penales de los aludidos, ninguno cumpliría una hipotética sentencia en la cárcel.
Juan Emilio Gatica, fiscal de la causa, informó que se están mostrando todos los antecedentes para que el tribunal dé una resolución.
Se espera que en la jornada de este jueves la Fiscalía decida si acoge las penas ofrecidas por la defensa y así culminar el caso.
EL CASO
Recordar que el delito por el que se sentenció a las siete personas fue el de asesinar a un bebé de sólo dos días de vida por motivos de una supuesta 'salvación mundial' que esto conllevaría.
Ramón Castillo Gaete -autodenominado como Antares de la Luz- era el líder de la secta de Colliguay, agrupación que el 23 de noviembre de 2012 usó al lactante como sacrificio humano ante un posible fin del mundo.
Castillo fue el único que no alcanzó a enfrentar a la justicia por el crimen, puesto que tras ser perseguido por la policía se suicidó en Perú.