La idea es dar a conocer a los usuarios del Metro de Santiago el estado de funcionamiento de la red, antes de que estos atraviesen el torniquete hacia el andén. Esto, con el objeto de que tomen la mejor decisión de viaje, con el fin de evitar retrasos por anomalías en el servicio del tren subterráneo.
Se trata de un sistema de "semáforos" instalados en las 22 estaciones con mayor demanda, los cuales indican si éstas están expeditas o no a través de mensajes explicativos acerca de la situación al interior de las líneas.
En este sentido, los letreros informativos dan cuenta si el tren subterráneo opera en los tiempos habituales (color verde), si hay que considerar mayores tiempos de viaje (color amarillo) o se recomienda utilizar alternativas de transporte (color rojo).
Las estaciones con esta iniciativa ya aplicada son: La Cisterna, Vicente Valdés, San Pablo, Tobalaba, Santa Ana, Los Héroes, Baquedano, Manquehue, Plaza de Armas, Las Rejas, Universidad de Chile, Plaza de Puente Alto, Plaza de Maipú, Escuela Militar, Cal y Canto, Pedro de Valdivia, Los Leones, Hospital Sotero del Río, Pajaritos, Irarrázaval, La Moneda y Estación Central.
El gerente de Operaciones y Servicios de Metro, Ramón Cañas, expresó que "estamos convencidos de que mejor información repercute indiscutiblemente en una experiencia de viaje de calidad, que es el objetivo que hoy nos mueve".
Del mismo modo, cabe señalar que la iniciativa busca enfrentar un aumento de demanda histórico en el Metro de Santiago.