El recorrido de Pullman Bus de Valparaíso a La Serena pretendía ser como cualquier otro este jueves por la noche: pocos pasajeros y un tramo fácil.
Con tan poca dificultad parecía ser el viaje, que el conductor y el auxiliar de la máquina decidieron realizarlo tras haberse tomado algo más que una copa.
Luego de realizar la salida desde Valparaíso y pasar a recoger pasajeros a Viña del Mar, estos últimos se percataron que algo no andaba bien en el hálito de los responsables de la conducción.
Tras esto, decidieron llamar a Carabineros los que a poco andar detuvieron el bus y procedieron a realizar el alcotest de rigor. El conductor del bus, quien fue interceptado a pocas cuadras del lugar tras darse a la fuga, marcó la nada despreciable cifra de 1.83 gramos de alcohol por litro de sangre. Mientras tanto el auxiliar, quien estaba escondido en su litera bajo el bus, marcó 1.44 gramos de alcohol por litro de sangre.
Ambos fueron trasladados hasta el Hospital Gustavo Fricke para constatar lesiones y para ser sometidos a los exámenes que comprobaran su estado, sin embargo, ambos debieron ser reducidos tras un duro forcejeo con Carabineros.
Las identidades de ambos no han sido reveladas, pero- según informó Carabineros- pasarán a control de detención este viernes por conducción en estado de ebriedad y maltrato a los uniformados.