Si cientos de trabajadores soportaron largas esperas en los paraderos de los sectores oriente y norponiente debido al paro de los conductores de los alimentadores B y C del Transantiago, la tarde de este lunes el panorama amenaza con ser igual de conflictivo.
Miguel Donoso, presidente del sindicato 5, afirmó que no hay avances en las negociaciones con RedBus para solucionar una serie de demandas laborales, por lo que la paralización podría continuar en la hora punta de la tarde.
El escenario es aún más complicado debido a que la empresa de transportes aseguró que la huelga era ilegal y que los trabajadores que habían adherido a ella pueden ser despedidos.
La paralización de actividades afectó a las comunas de Independencia, Renca, Recoleta, Conchalí, Huechuraba, Quilicura, Vitacura, Las Condes, Lo Barnechea y Providencia.
En tanto, la Coordinación General de Transportes de Santiago señaló que se activó un plan de contingencia para enfrentar la falta de buses con la incorporación de 100 vehículos de las empresas Subus, Vule y Metropolitana. Éste funcionará por el tiempo que sea necesario, indicó.
"Entendemos las demandas laborales que pueden tener los conductores, pero no compartimos las medidas de presión (...) Hemos instruido a RedBus para que tome las medidas que permitan evitar este tipo de acciones que sólo perjudican a los pasajeros del transporte público", agregó Patricio Pérez, coordinador del Transantiago.