El cónsul chileno en Módena, Rodrigo Vergara, confirmó que hasta el momento no hay compatriotas involucrados en los derrumbes que le cobraron la vida a al menos quince personas en la zona tras la seguidilla de fuertes sismos que afectaron la región.
El diplomático indicó que la "situación es más grave" que la que experimentaron hace nueve días en el terremoto de 6,0 grados que afectó la región de Emilia Romagna. En entrevista con el canal 24 Horas, el cónsul señaló que la mayoría de los fallecidos eran obreros que se encontraban trabajando al interior de edificios derrumbados tras el fuerte sismo del 20 de julio.
Confirmó, además, que es posible que aumente el número de víctimas fatales.