Tres millones de dólares de gastos injustificados detectó la Contraloría General de la República al interior del Ejército de Chile entre los años 2016 y 2018 en un informe dado a conocer este jueves
El documento analizó diversos gastos injustificados, entre el 1 de enero de 2016 y el 31 de diciembre de 2018. Eventuales irregularidades que generaron polémica y que desencadenaron el inicio de un sumario, además de ser entregado este informe a la Fiscalía y al Servicio de Impuestos Internos,
Según explicó el director ejecutivo de Chile Transparente, Alberto Precht, "existe una discrecionalidad, concentración de poder y bajo nivel de control. Estos tres aspectos se daban en el Ejército, hasta el año 2018 y esto llevaba a que existiera esta desviación, que obviamente puede ser constitutiva de delito".
De acuerdo a lo que detalla el informe, los más de 3,1 millones de dólares se distribuyen en 3 de estos millones de dólares destinados para el pago de fletes, embalajes y excesos de equipaje. Además, 12 millones de pesos fueron destinados para cambios de residencia y más de tres mil dólares por conceptos de viáticos, que según la Contraloría no estarían justificados ni con documentos ni con boletas.
En tanto, el Ejército respondió que "la legislación y reglamentación vigente en los años 2016, 2017 y 2018, no contempló la obligación de rendir cuentas, por lo que, a su juicio, no resulta exigible la documentación del pago efectivo por fletes, embalajes y excesos de equipaje del personal".
Los dineros cuestionados corresponden al periodo del ex comandante en jefe del Ejército, Humberto Oviedo y su sucesor, el actual líder de la institución, Ricardo Martínez, que asumió en marzo de 2018.
En el documento no figura ningún nombre de los involucrados, pero fuentes de 24 Horas confirmaron que en el listado se encuentra Oviedo y también el ex comandante en jefe, Juan Miguel Fuentealba. Asimismo, de los funcionarios activos se encuentran los generales José Marzal Sánchez, Osvaldo Vallejos, Pedro Varela, Guillermo Sánchez y Carlos Ricotti, este último comandante de la Guarnición de Ejército de la Región Metropolitana.
¿Cuál era el mecanismo utilizado por el Ejército que despertó las sospechas de Contraloría?
De acuerdo a lo explicado en el informe, la institución proporcionaba fondos a funcionarios para que solventaran el pago de fletes, embalajes o de equipaje, donde dos compañías siempre eran las escogidas para dichos fines; Blanco Viajes y Turismo Costanera.
Según el documento, uno de los representantes de las empresas señaló a Contraloría que la operadora de la sección de pasajes y fletes, Paz Ramos, solicitaba que esos dineros por concepto de equipaje, fueran devueltos a ella en forma de dólares y en efectivo. Ramos también recibía los fondos de los pasajes de avión no utilizados en los mismos términos.
Solo entre 2016 y 2017 la operadora de la sección de pasajes y fletes recibió casi 100 mil dólares en efectivo, cifras que nunca el Ejército mostró registros.
El informe indica que Contraloría comprobó que 108 documentos tributarios equivalentes a casi 1.300 millones de pesos, emitidos por las empresas proveedoras de pasajes internacionales entre 2016 y 2018, no se encontraban registrados en la contabilidad de la institución.
Es por ello que el órgano contralor ordenó mantener un registro de los documentos emitidos ya que existe el riesgo de que recursos públicos sean utilizados para otros fines.
En tanto, el Ejército reiteró que en el periodo investigado por Contraloría no existía obligación para rendir los pagos asociados, por lo que no se tratan de pagos ilegales, ya que fueron correctamente asignados, contabilizados y utilizados.