La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) decretó alerta roja producto de la actvidad del volcán Copahue en la región del Biobío.
Esto luego que el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin) registrara un aumento en la frecuencia y actividad sísmica del macizo.
"Tiene el riesgo de entrar en erupción", señaló el ministro del Interior, Andrés Chadwick, al anunciar la medida adoptada que implica la evacuación de las personas que habitan la zona colindante al volcán.
Según señaló el secretario de Estado, un total de 2.240 personas serán trasladadas desde los cajones de Teuco y Biobio hacia albergues ubicados en zonas de seguridad. Esto implica la salida de familias que habitan en un radio de 25 kilómetros del macizo en camiones del Ejército y buses.
"Esta evacuación la tenemos que hacer con carácter obligatorio (...) nuestro deber como autoridad es proteger a las personas y esperamos el máximo de colaboración", agregó Chadwick.
La base de operaciones para el monitoreo y puesta en marcha del plan de emergencia decretaro por la Onemi se ubicará en la gobernación del Biobío.
El director de la Onemi, Raúl Toro, agregó además que la evacuación debería realizarse en un plazo de 48 horas, debido a que son pocas horas de luz y el sistema frontal que afecta a la zona complica las labores.
"A lo más deberían ser 72 horas, de acuerdo a la voluntad de las personas para cumplir este plan", señaló.
INTENSA ACTIVIDAD
El pasado viernes se informó que una cámara instalada cerca del volcán permitió observar una columna de humo y cenizas con una altura máxima aproximada de 1.500 metros y una pluma orientada en dirección noreste, detectándose incandescencia.
Un sobrevuelo ese día permitió observar una intensa actividad fumarólica concentrada en tres sectores, en dos de los cuales predominaba vapor de agua y gases azufrados, mientras el tercero tenía una coloración gris debido a partículas de cenizas.
El macizo presenta en su registro eruptivo antecedentes de erupciones de magnitud baja a moderada. Uno de los escenarios frecuentes es la ocurrencia de erupciones freáticas o freatomagmáticas, generadas por interacción de magma y agua, donde el principal peligro es la caída de material piroclástico.
En erupciones similares, pero de mayor magnitud, podrían generarse oleadas piroclásticas y lahares. El área de peligro proximal (radio de 15 kilómetros) susceptible de ser afectada por lavas y/o lahares no incluye localidades pobladas.
En erupciones de mayor envergadura pero menor probabilidad de ocurrencia, eventuales flujos piroclásticos podrían extender sus efectos a zonas más alejadas (radio de 25 kilómetros). El área susceptible de ser afectada por caída de ceniza con espesores mayores a 1 centímetro se ubica fundamentalmente al oriente del volcán.
Foto: Agencia Uno/ Archivo
