Casi dos meses estuvo prófugo un peligroso delincuente que se arrancó de los Juzgados de Garantía de San Bernardo. Después de ser recapturado confesó que mantenía una llave de las esposas escondida en su ropa.
La llave, según su propio testimonio, la obtuvo luego que un gendarme de la cárcel de Puente Alto la perdió.
El 14 de marzo huyó Fabían Díaz Castro. En la oportunidad incluso llevaba puesto su chaleco de imputado. Durante el tiempo que se mantuvo escondido de la justicia, visitó su casa de San Bernardo.
Sin embargo, en un operativo que incluyó enfrentamientos con armas fue recapturado por una sección especial de Carabineros. El delincuente tenía un amplio prontuario y se especializaba en portonazos.
Debido a su peligrosidad, fue trasladado hasta la Cárcel de Alta Seguridad.