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Saa lamenta "fanatismo" de evangélicos

La diputada María Antonieta Saa respondió a las críticas del obispo Espinoza y lo calificó de tener "desconocimiento e ignorancia".

Agustín Benaprés

Domingo 16 de septiembre de 2012

Bastante polvo levantaron las declaraciones del Obispo Hédito Esponiza tras el Tedeum de las iglesias protestantes, celebrado en la Catedral Evangélica.

A las acusaciones y críticas a jueces, la sociedad y al senador Fulvio Rossi, se suma la diputada María Antonieta Saa.

Según el Obispo Espinoza, "una parlamentaria intenta despenalizar una relación sodomítica entre un niño y un adulto si es que ésta es consentida".

Consultada por Canal 24 Horas sobre si apoya este proyecto, la parlamentaria sostuvo que "de ninguna manera. Lo que estamos haciendo es igualar la edad heterosexual con la edad homosexual. Hoy la ley indica que cualquier acción sexual con una persona menor de 14 años es considerada que no puede ser y con respecto a la homosexualidad a los 18 años".

Para Saa, "lo que se trata es igualar, porque nosotros en Chile creemos que el valor de la igualdad es algo tremendamente importante".

La parlamentaria respondió a los ataques y dijo "yo lo lamento, primero su desconocimiento, ignorancia de poder decir una cosa que no es así. Lamento como decía el senador Rossi que ocupen lugares tan importantes para denostar a compatriotas".

Además agregó que "la iglesia evangélica con algunos pastores, ejercieron una enorme presión para que no se aprobara la ley antidiscriminación al igual que unos obispos de la Iglesia Católica. Es muy importante en una democracia que las creencia religiosas y el Estado estén separados. No podemos llegar a ciertos excesos en el nombre de Dios".

María Antonieta Saa hizo una comparación con tiempos pasados y cómo afrontaron la libertad de culto.

"La Iglesia Evangélica fue profundamente perseguida, ignorada y prohibida durante muchos períodos en Chile y nos jugamos por una ley de libertad de culto. Pero esa libertad no puede ocuparse para denostar a la ciudadanía que es diversa", sostuvo.

"La Iglesia Evangélica ha tenido un enorme fanatismo en rechazar a las personas homosexuales de una manera que atenta contra sus propias creencias que todos son hijos de Dios y que todos son personas que merecen respeto y dignidad", concluyó.