El arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, realizó su habitual saludo navideño y clamó por la equidad en "el desarrollo de Chile".
Al mismo tiempo, enfatizó su saludo a "quienes celebran la fiesta de navidad en el calor del hogar, y para quienes estarán solos y abandonados, para los niños y los jóvenes, los ancianos, los enfermos, para las familias, feliz navidad".
Pero fue tajante en afirmar que en esta fecha de recogimiento y encuentro, es importante que "la justicia y la solidaridad siguen floreciendo en el alma de los hombres y mujeres de nuestras ciudades y campos".
"Que muchos jóvenes creen en un mundo más transparente y limpio, que trabajan para globalizar la solidaridad, que cada día numerosas mujeres amasan el pan de la comunión y del amor hogareño", agregó.
"De la pobreza que aún sufren muchos de nuestros hermanos y hermanas, del anhelo de los jóvenes para una educación de mayor calidad, de la insuficiente respuesta que ofrecemos a los niños y niñas vulnerados, del dolor por los abusos cometidos", indicó.
"Le hablaremos también de la tentación a la violencia, que a veces empaña nuestra mirada. Del consumismo que intenta detener las aspiraciones más nobles; del compromiso de muchos para avanzar en el camino de humanizar y compartir con equidad el desarrollo de Chile", sostuvo.