El cardenal Ricardo Ezzati se refirió a la decisión del Papa Francisco de expulsar del estado clerical a Fernando Karadima Fariña.
A través de un mensaje difundido por el Arzobispado de Santiago, el sacerdote sostuvo que "el Santo Padre ha tomado esta grave decisión excepcional en consciencia y por el bien de la Iglesia. El Santo Padre ha ejercido su potestad ordinaria que es suprema, plena e inmediata y universal en la Iglesia, consciente de su servicio al Pueblo de Dios como sucesor de san Pedro".
Además, acotó que "el decreto firmado por el Papa el jueves 27 de septiembre de 2018, entró en vigor automáticamente desde ese mismo momento y comporta también la dispensa de todas las obligaciones clericales. Ha sido notificado a Karadima Fariña el viernes 28 de septiembre de 2018".
Respecto a la decisión del Sumo Pontífice, el arzobispo de Santiago manifestó dos ideas fundamentales.
"En primer lugar, lo que el Santo Padre firma. Dice que es una decisión excepcional, o sea, que no está dentro de lo que se hace ordinariamente. El Papa ha llegado a esta decisión excepcional en conciencia, es decir, por motivos que tocan su ministerio de pastor y la responsabilidad que tiene en este ejercicio del ministerio de pastor. Lo ha hecho por el bien de la Iglesia y en la Iglesia está todo el Pueblo de Dios, desde las personas que han sido víctimas y han sufrido de los abusos al bien de los fieles, que están llamados a caminar en rectitud de vida, y de los sacerdotes, que están llamados a caminar de acuerdo a los grandes valores de su vocación y en bien de la sociedad".
Asimismo, acotó que "los católicos de Santiago y la gente de buena voluntad estamos llamados a acoger esta determinación del Santo Padre, quienes creemos y somos parte de la Iglesia, con fe y fidelidad a la acción del Santo Padre".
Ezzati puntualizó que "en segundo lugar, también hacerlo con esa actitud de colaborar con la tarea propia de la Iglesia de reparar todo daño causado a las víctimas y también a todas las personas que han sufrido y sufren por este hecho, y también en vista de lo que es un camino que queremos que sea cada vez más transparente de acompañamiento de estas situaciones de formación para que no sucedan, para que justamente el ‘nunca más’ sea también realidad en nuestra Iglesia de Santiago".