Los 11 taxistas detenidos por el ataque a dos buses del Transantiago fueron formalizados durante este miércoles, por los delitos de incendio y robo con intimidación, en un hecho que tuvo lugar al término de una protesta contra Uber y Cabifiy en julio pasado, en Estación Central.
La Fiscalía solicitó prisión preventiva para los sujetos, y sostuvo frente al Tribunal que sólo por el delito de robo con intimidación arriesgan una pena de 10 años de presidio.
El Ministerio Público también planteó que se trata de una banda organizada, quienes con anticipación habrían planeado el ataque. Como pruebas, presentaron declaraciones de testigos, llamadas telefónicas y las cámaras de seguridad aledañas al terminal de buses de Estación Central.
Además, se estableció que varios de los involucrados manipulaban billetes falsos y utilizaban autos robados.