Alrededor de las 22.00 horas efectivos de Fuerzas Especiales de Carabineros arribaron al penal Cordillera, lugar donde se encuentran recluidos los nueve militares en retiro que serán trasladados a Punta Peuco.
Los efectivos llegaron acompañados por al menos un carro lanzaaguas, que mantuvo distancia frente a los manifestantes que desde temprano se encuentran en las inmediaciones del recinto que será cerrado por orden del Presidente Sebastián Piñera.
La policía instaló nuevas vallas papales y agrupó en un sector a todos las personas que, con carteles y banderas, se mantenían expectantes en el penal Cordillera.
Además, un grupo de efectivos resguardó la portón de acceso al recinto y así prevenir que los manifestantes se acerquen al penal.
El operativo policial se desarrollaba en tranquilidad, sin embargo, un pequeño grupo de personas le lanzó piedras a los efectivos de la policía.
El tránsito se encuentra totalmente interrumpido en la avenida José Arrieta.
Cabe señalar que sería inminente el traslado de los internos al penal Punta Peuco, recinto ubicado en Tiltil y donde contarán con menos comodidades que las existentes en Cordillera.
