Carteles, redes criminales, mafias.
Estos adjetivos salieron a la luz después del crimen del suboficial en retiro de Carabineros, Tomás Urra, en la comuna de Conchalí y que dejó en evidencia amedrentamientos de quienes intentan monopolizar la venta de merluza en la capital.
Muchos no se atreven a hablar, otros culpan a las cuotas controladas de extracción y la proliferación de la pesca ilegal.
Desde Sernapesca hablan de verdaderos "carteles". Aunque las fiscalizaciones periódicas disminuyeron el tráfico de pescado y los delitos dentro del terminal pesquero, en el exterior continúan los ilicitos relacionados a la comercialización de este producto.
En tanto, las cifras indican que gran parte de la pesca ilegal en Chile proviene de la región del Maule con destino a la región Metropolitana.
Sólo entre mediados de febrero y marzo de este año, la autoridad incautó 16 toneladas de merluza.
Foto: Agencia Uno