Inaugurada el 2 de enero de 1942, se convirtió así en el primer servicio de estas características en Chile y en esta parte del continente, en una época en que las cifras de mortalidad infantil eran bastante elevadas, principalmente, a causa de patologías como diarrea, desnutrición, sarampión, poliomelitis, tuberculosis, difteria, viruela, varicela e incluso cólera.
En su primer año de funcionamiento, contaba sólo con 10 médicos residentes -5 cirujanos y 5 internistas- y llegó a atender a más de 10 mil 500 niños y niñas, que aumentaron a 13 mil durante 1943. Hoy, como uno de los principales centros de atención de urgencia infantil de la Región Metropolitana, cuenta con una dotación de 112 funcionarios entre médicos, enfermeras, técnicos paramédicos, auxiliares de servicio y personal administrativo, y exhibe cifras de cerca de 80 mil atenciones anuales, con las causas respiratorias y los traumatismos como los principales cuadros.
En sus instalaciones, en tanto, se realizan al año más de 600 intervenciones quirúrgicas, siendo las principales las operaciones por fracturas (212) o apendicitis (198).
Para conmemorar este importante hito, se organizaron una serie de actividades oficiales y de camaradería, que culminaron este viernes con un acto con la presencia de autoridades y el descubrimiento de una placa conmemorativa.
Con motivo del aniversario, el Dr. Patricio Vera, director del Hospital Clínico San Borja Arriarán –y quien también se desempeñó como médico y director del Servicio de Urgencia Infantil-, indicó que “sin duda este servicio ha sido uno de los pilares en el desarrollo de esta institución. Podemos decir con certeza que fue el precursor de las unidades de emergencia del país, formador de grandes especialistas en el área de urgencia, y una de las principales puertas de entrada de los pacientes pediátricos que se atienden en nuestro hospital”.
El directivo agregó que “el aniversario de la SUI es muy importante para el hospital y debe ser motivo de celebración para todos los integrantes de esta gran familia. Este hito nos recuerda cómo hemos crecido como centro de salud y cómo hemos ido adaptándonos a los cambios epidemiológicos, con el objetivo de dar respuesta a las necesidades de nuestra población infantil”.