El obispado de San Felipe de Aconcagua entregó este viernes el resultado de la investigación al obispo de esa ciudad, Cristián Contreras Molina, acusado por supuestos casos de abuso contra un menor de edad.
"La instancia vaticana ha concluido que dichas acusaciones no son ciertas y ha establecido la ausencia de elementos incriminantes", fue parte de las conclusiones de dicha investigación.
"Siempre dije que esta acusación era una calumnia, ahora estoy tranquilo", explicó Contreras.
Las indagatorias comenzaron luego de conocerse la denuncia, en febrero de este año, fecha en que el mismo obispo Contreras emitió una declaración pública en la que aclaró que fue él quien solicitó la investigación del la Santa Sede.
De acuerdo al comunicado emitido en ese momento, la petición respondía al "deseo de que la Santa Sede investigara la veracidad de las denuncias que le imputan presuntos delitos graves contra la moral y el cumplimiento de sus obligaciones ministeriales, cuyos contenidos considera completamente infundados".
El documento agrega que todas las personas que han entregado información en el proceso "se encuentran obligadas a guardar sigilo acerca de ellas, de los procedimientos y detalles de la misma hasta que ésta concluya con una decisión final".
El obispo agregó también que "en esta iglesia, no tienen cabida los sacerdotes que abusan de los menores, esto significa que yo he seguido siempre el protocolo de la Iglesia y ese indica que ante cualquier denuncia hay que seguir ese protocolo".