En un inédito decomiso el OS-7 de Carabineros incautó en Antofagasta 38 hongos de una especie altamente alucinógena que eran cultivados por un hombre de 23 años en su domicilio del sector sur de la ciudad.
La especie, conocida como hongos mágicos o cucumelo, llegó en esporas de manera ilegal al país ya que es propia de zonas húmedas en Centroamérica.
Posee dos agentes activos altamente alucinógenos cuyos efectos primarios de un gramo de ingesta podrían durar entre cuatro y seis horas.
Desde el departamento bioquímico de Labocar advirtieron que su consumo en altas dosis podría incluso provocar la muerte.
Fueron 38 ejemplares de los que se podría haber obtenido más de 600 dosis que, de haber sido comercializadas, darían ganancias superiores a los 12 millones de pesos.