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Investigación asegura que la dictadura espiaba a niños

Mediante cartas enviadas por informantes, se recibían denuncias sobre estudiantes, profesores o funcionarios que eran de oposición, según revela un reportaje de la agencia alemana DPA.

Elkjaer Lobos

Jueves 27 de junio de 2013

Conocida es la intensa labor de los organismos de inteligencia en tiempos de la dictadura de Augusto Pinochet.

Lo que sí es novedoso es que también se investigaba a niños, según revela una investigación periodísticas de la agencia de noticias alemana DPA, en donde el periodista Mauricio Webel tuvo acceso a 30 mil archivos secretos de la extinta Central Nacional de Informaciones (CNI).

Estos documentos eran enviados desde el organismo de inteligencia al Ministerio de Educación, práctica realizada a lo largo de toda la dictadura.

DPA cita algunos casos como el de Víctor Osorio (actual presidente de la Izquierda Cristiana) e Iván Salinas, quienes estuvieron "bajo la lupa" de la inteligencia. Respecto a este último, un cable de la CNI dice lo siguiente: "Iván Salinas organiza y agita a los alumnos, mandándolos a las 'marchas del hambre', realizadas en el centro de Santiago".

Según el reportaje, estos seguimientos involucraron colegios religiosos, públicos y privados, además de funcionarios del propio ministerio.

La investigación cita como ejemplo lo que ocurrió en 1988 en la Alianza Francesa, cuando hubo despidos masivos de profesores simpatizantes de volver a la democracia.

Pero cómo se conocía esta información. Según DPA, apoderados y profesores enviaban cartas directas al general Pinochet e, incluso, la esposa de éste, Lucía Hiriart, delató a un funcionario ministerial.

Por ejemplo, para Hiriart, Humberto Vera era simpatizante socialista y, por tanto, enemigo del régimen. Sin embargo, el entonces titular de Educación, Juan Antonio Guzmán, calmó a la esposa de Pinochet asegurándole que "fue nombrado directamente por la Presidencia".

A estas prácticas se suma la conformación de juventudes simpatizantes al régimen y cuya tarea era de defender la obra de Pinochet.

Hijos de autoridades y de funcionarios de Gobierno asistían a clases de "Seguridad Nacional" y "Doctrinas Totalitarias". En esta labor participaron la CNI, el actual ministro del Interior, Andrés Chadwick, y el ex presidente de la Cámara de Diputados, el diputado UDI Patricio Melero, según señala la investigación.

Pese a estos esfuerzos, desde la oposición también se agruparon en organizaciones como la AEM, la COEM, la ASEC y la FESES. En medio de la represión de esos años, el joven de 17 años Mauricio Maigret murió abatido a tiros en 1984.

Según el reportaje de DPA, a estas acciones se sumaban indagaciones a cargo de la CNI cuyo objeto era indagar a toda persona que era contratada por el Estado. De hecho, ningún profesor podía hacer clases en liceos públicos sin que fueran investigados.

Todas estas inciiativas era parte del "Plan de Guerra del Frente Interno", operativo coordinado por la Oficina de Seguridad.