Una negligencia médica en el Hospital de Linares, en la Región del Maule.
Eso es lo que acusan amigos y familiares de Thalía, una joven de 17 años que falleció luego de perder su embarazo de 18 semanas.
Thalía llegó al recinto mencionado con contracciones y —según su familia— le dijeron que la afectaba una apendicitis.
Lo siguiente fue hacerle exámenes que descartaron ese diagnóstico, para luego hacer una ecografía en donde se le dijo que su hijo estaba en perfectas condiciones.
Sin embargo, "a las dos horas mi hermana pidió ayuda y perdió el bebé en el pasillo", señaló Jéssica Mardones, hermana de Thalía, quien estaba emparejada con un ciudadano argentino, Marco Reyna.
Pero la situación fue empeorando y a Thalía se le hinchó el cerebro, a tal punto de que fue derivada al Hospital de Talca para ser operada. El 22 de noviembre, Thalía falleció por un edema cerebral agudo.
Ahora, la familia pide justicia, por lo que realizaron una marcha que culminó en el hospital donde instalaron velas.
El hospital, a través de su subdirector médico, doctor Cristóbal Campos, señaló que se investiga lo sucedido a través de un sumario, mientras que el Ministerio Público ya tipificpo el hecho como cuasidelito de lesiones.